Adivinanzas Fáciles

Quien fue perseguidor de Jesús,
al ir para Damasco
le resplandeció la verdadera luz.

¿Sabes por qué un gato al entrar a una habitación mira primero a un lado y después al lado opuesto?

Por caminitos de hierro.
El gusano de metal.
En su barriga transporta.
La gente por el país.
Llevándola por un túnel.
En completa oscuridad.

En él me monto,
me puedo matar,
de ellos muy llena
está la ciudad.

¿Cuál es el colmo de un caballo?

Santa con nombre de flor.
Ya pesar de este retrato.
Me confunden con zapato.

¿Qué le dice un pollo a otro pollo?

Fue el sol quien me dio la vida,
y el sol me suele acabar,
hago a la gente asombrar,
y aunque del agua nacida,
al aire vuelvo a parar.

¿Qué instrumento se puede oir pero, no se puede ver ni tocar?

Durante el día duermen,
Y despiertan al llegar la noche.
Con ellas el cielo se alegra,
y hace fiesta con gran derroche.

Aunque tengo cuatro patas,
no me puedo ni mover;
llevo encima la comida
y no la puedo comer.

Niños y niñas
con sus profesores,
pupitres y sillas,
pizarras y flores,
libros y cuadernos,
tizas, borradores,
muchos lapiceros
de varios colores.
Allí tu vas.
¿Lo adivinarás?

¿Qué árbol se desespera, cuando le quitan la fruta?

Existo cuando me guardan,
muero cuando me sacan.

Yo en el suelo me crié
y todos sin compasión,
para saber si estoy rica
me comen el corazón.

Llenos de agua,
llenos de vino,
sobre la mesa están
y son de cristal fino.

Tengo un tabique en el medio.
Dos ventanas a los lados.
Por las que entra el aire puro.
Y sale el ya respirado.

Tengo muchos pares.
Te los puedes probar.
Pero si te los llevas.
Tendrás que pagar.

Un bichito verde
sobre la pared,
corre que te corre,
busca qué comer.

¿Cuál es el animal que nace y no muere?

Con dos patas encorvadas.
Y dos amplios ventanales.
Quitan sol o dan visión.
Según sean sus cristales.

Zorra le dicen, ya ves,
aunque siempre del revés,
se lo come el japonés
y plato muy rico es.
¿Qué es?

Lámina que no se ve
y nos protege del viento.
Aunque la atraviesa el sol,
se empaña con el aliento.

Blanca como la leche
Negra como el carbón es
Habla aunque no tiene boca
Y anda aunque no tiene pies.

Somos verdes y amarillas,
también somos coloradas,
es famosa nuestra tarta
y también puedes comernos
sin que estemos cocinadas.

Mi padre al cuello la ata.
Y poco a poco, la aprieta.
Hasta llegar a su meta.

¿Qué le dice el mar a uno que se está ahogando?

Aunque no soy florista
trabajo con flores
y por más que me resista
el hombre arrebata
el fruto de mis labores.

Con una manguera, casco y escalera.
Apago los fuegos y las hogueras.

Era alto
y de bello parecer.
Y cuando lo nombraron rey
Tras el bagaje se fue a esconder.

Sin mí no tendrías pan,
ni pasteles, ni empanada.
Nazco verde y estoy dorada
por los días de San Juan.

Del techo al suelo,
cortada y fina,
tela con vuelo.

Forma una palabra con las siguientes letras: abapualnar.

Tengo duro cascarón,
pulpa blanca
y líquido dulce
en mi interior.

¿Quién será, quién no será,
que de noche sale
y de día se va?

Fue engañadora
y adúltera la infiel mujer.
Y se decía profetiza,
Más era empleada de Lucifer.

Don dedin tiene un sombrero.
Para no hacerse agujeros.

A la entrada de tu casa.
Algo suena si la aprietan.
Y tú sales presuroso.
A abrir deprisa la puerta.

Pregunto por la pelea
entre reyes y señores,
que sin ninguno se vea,
unos son vencidos
y otros vencedores.

Tiene dientes
y no come,
tiene cabeza
y no es hombre.

¿Cuál era el monte más alto antes de que se descubriera el Everest?

Agua pasa por mi casa,
cate usted que es maravilla;
yo me lo como en tortilla.

¿Os lo creeréis si os lo digo.
Que esta es su capital?
Pero no es esta, os lo digo.
Sino ruega y lo sabrás.

Por un caminito alante
va caminando un bicho,
y el nombre del bicho
ya te lo he dicho.

Pisados, siempre en el suelo,
recibiendo malos tratos,
y sin señales de duelo.

¿Por qué tienen los camellos las patas tan largas?

Tengo cabeza redonda,
sin nariz, ojos, ni frente,
y mi cuerpo se compone
tan sólo de blancos dientes.

¿Qué ciudad de cuatro letras esta en el centro de la antigua Checoslovaquia?

Sobre un camino de hierro.
Muchas sorpresas tendrás.
Subo y bajo bruscamente.
A mucha velocidad.

En dos castañuelas voy encerrado.
Y al sacarme del mar
me pongo colorado.

Somos blancos, larguiruchos,
nos fríen en las verbenas,
y dorados, calentitos,
nos comen nenes y nenas.

Bolitas pequeñas, de metal o de cristal.
Mételas en el hoyo y nunca perderás.

Sólo una vez al año
tú celebras ese día,
y conmemoras la fecha
en que llegaste a la vida.

Tengo cadenas sin ser preso.
Si me empujas voy y vengo.
En los jardines y parques.
Muchos niños entretengo.

Pequeños, redondos con agujeritos.
Valemos muy poco, solos o juntitos.
Más de nosotros depende.
El buen vestir de la gente.

Pan y medio
y medio pan,
tres panes y un pan.

Soy una loca amarrada
que solo sirvo
para la ensalada.

Seco como un tronco soy,
en el agua me deslizo,
en la orilla tomo el sol
y a todos atemorizo.

¿Cual es el colmo de un reportero?

¿Qué cosa es,
que silba sin boca,
corre sin pies,
te pega en la boca
y tú no la ves?

Dos madres y tres hijas, van con tres mantos a misa.

Ni torcida ni inclinada.
Tiene que estar la pared.
Para eso tengo plomada.
Y me ayudo del nivel.

Algunos meses tienen 31 días, otros solo 30.¿Cuantos tienen 28 días?

En un punto y un instante,
en un punto fue mi ser.
Sirvo al rey, sirvo al tunante
y al que me quiere ocupar,
y para mentar mi nombre
me parten por la mitad.

¿Cual es el colmo de un astronauta?

¿Qué será, qué no será,
que mientras más se le saca,
más hondo está?

¿Qué le dice el gorrión al cura?

Redondo soy
y es cosa anunciada
que a la derecha algo valgo,
pero a la izquierda nada.

¿Quién es el hijo de mi madre que no es mi hermano?

Dos guaridas cálidas
con sus escondrijos,
para dos hermanas
y sus quintillizos.

Bueyes y vacas lo comen.
Y en el campo, verde.
Empaquetada lo ponen.

Mi reinado está en el mar,
soy de peso regordeta;
un día, siglos atrás,
me tragué entero a un profeta
aunque luego lo expulsé
al pensar que estaba a dieta.

Bolita tengo tinta.
También capucha tengo.
Y escribo bien.

Sin ella en la mano
ni entras ni sales,
ni vas a la calle.

Mi compañerita y yo
andamos en un compás,
con el pico hacia adelante
y los ojos hacia atrás.

Tengo caballos que suben y bajan.
Dan vueltas y vueltas y nunca se cansan.

Aunque músculos no tengo,
los techos yo sostengo.

En las manos de las damas
casi siempre estoy metido,
unas veces desplegado
otras veces recogido.

Fue un profeta que luchó
Contra el imperio del mal
Y mató a 450 profetas de Baal.

La letra más alta soy.
La más delgada también.
La luna y el sol me llevan.
El aire nunca me ve.

¿Cómo sacas a un elafante de un rio?

Cuando el tiempo se nos troca,
veréis si queréis mirar,
a un animal que nos canta
sin tener dientes ni boca.

El reloj de la Puerta del Sol da una campanada cada segundo. ¿Cuanto tarda en dar 12 campanadas?

En Granada hay un convento,
y más de mil monjas dentro,
con hábito colorado;
cien me como de un bocado.

La jaula es su casa,
su ropaje amarillo,
con su canto alegra
a todos los vecinos.

Un valiente domador.
Que tiene la intrepidez.
De enseñar a la niñez.

Corre mulita
en cancha pareja,
clava la uñita
y para la oreja.

Nunca podrás alcanzarme,
por más que corras tras mí,
y aunque quieras retirarte
siempre iré yo junto a ti.

Un bichito muy ligero
anda por tierra preciosa,
a cada bocado que da
deja sembrada una rosa.

Te doy mi leche y mi lana
y para hablar digo bee,
si no adivinas mi nombre
nunca yo te lo diré.

Haga frío o calor,
siempre con un cobertor.

Diminuta astillita de cabecita roja.
Capaz de hacer cenizas a la madera más gorda.

En un cuarto me arrinconan.
Sin acordarse de mí.
Pero pronto van a buscarme.
Cuando tienen que subir.

Tengo mas de 3 lados y menos de 5 lados. Tengo todos mis lados iguales.
¿Quién soy?

Mil dientes bien en fila.
Agudos y cortantes.
Que árboles robustos.
Derriban al instante.

Sólo una faja es mi vestido.
Cuando me lo quitan arranco a bailar.
Pies y manos no tengo.
Pero a los más jóvenes entretengo.

Pipi le dicen,
Rana se llama,
y no me lo aciertas
en una semana.

¿Qué es lo que se compra para comer y no se come?

Cortinas son,
de tela no.
Cuando nace el sol,
se abren,
se cierran al dormir yo
y se abren y se cierran,
sin ton ni son.

Destacan en las orejas.
Creyéndose independientes.
Van casi siempre en parejas.